La satisfacción de los empleados es esencial para el éxito de cualquier empresa. Cuando hay bienestar general las personas tienden a ser más productivos y comprometidos. Por lo que es importante medir esto para usar la información para mejorar las estrategias en RRHH y la experiencia de las personas.
“Lo que no se mide, no se puede mejorar”. Estamos en ese momento donde Recursos Humanos se apoya y se basa en datos y sus mediciones para recopilar, procesar y analizar información sobre los procesos de gestión de personas, como por ejemplo: desempeños, compensaciones, selección, cultura, entre otros.
Pero entonces… ¿Cómo medir la satisfacción de los miembros de un equipo?
Encuestas de satisfacción: Pueden abarcar diferentes aspectos del trabajo, como la comunicación, el liderazgo, el equilibrio entre vida personal y laboral, el desarrollo profesional y la remuneración.
Entrevistas individuales, 1-1: Sirve para generar un vínculo y relacionarnos de manera personalizada para tener mayor profundidad en las respuestas y fomentar una comunicación más abierta. Queremos saber cómo se siente la persona en su experiencia laboral.
Espacios de debate: Grupos de discusión donde se hable abiertamente (y fomentando la colaboración) sobre la cultura laboral, la comunicación y los líderes. Siempre buscando transparencia y participación. Todas las opiniones importan.
Mediciones de clima laboral: Para obtener una visión general de la satisfacción de los miembros del equipo. Los resultados ayudan a identificar puntos críticos y oportunidades de mejora, para luego realizar cambios efectivos en la cultura laboral.
Seguimiento del ciclo de vida del empleado: Hacer un acompañamiento a lo largo del tiempo y por cada instancia importante de la persona en la empresa, para detectar tendencias y patrones, debilidades y fortalezas de los procesos y cambios en la satisfacción y bienestar de las personas.
